Porqué se puede producir el dolor cuando hay un Puente Fijo?
Cuando se hace un trabajo de Rehabilitación Oral consistente en colocar un Puente Fijo hecho en Metal-Cerámica, o en Cerámica Libre de Metal por ejemplo en Zirconio, es preciso preparar los pilares o soportes de dicho puente. Para esto, si un diente que va a servir de soporte es natural, en perfecto estado, lo que se hace es tallarlo (desgastarlo), con la fresa retirando parte del esmalte dental de forma suficiente para que quede el espacio para la estructura de dicho puente. Si el diente que va a servir de soporte del puente está muy dañado en su corona, por caries o restauraciones muy grandes, primero se hace el Tratamiento de Conductos o Endodoncia, y luego se coloca un Retenedor Intrarradicular o Núcleo, o lo que llaman “Espigo”.
De esta manera quedan preparados todos los soportes o pilares del Puente Fijo.
Porqué puede presentarse dolor luego de colocar definitivamente el Puente Fijo?
Hay Varias razones para que esto suceda:
- Si un diente se talló para prepararlo como pilar del puente, y el tallado fue excesivo puede ocurrir que se presente una pulpitis irreversible o daño en el nervio del diente, y esto va a producir un dolor que se va a ir incrementando en intensidad y duración. Se puede solucionar esta condición de dos maneras: La primera es perforar la estructura del puente fijo hasta llegar al interior del diente y por este orificio hacer el tratamiento de conductos, lo cual será más sencillo si se trata de un diente anterior o sea un canino o un incisivo e incluso en un premolar. Cuando se trata de un molar puede ser más complicado o virtualmente imposible. La segunda manera, y la más recomendada, es retirar completamente el puente fijo, hacer el tratamiento de conductos del diente o dientes involucrados; y necesariamente colocar en ese diente o dientes un retenedor Intrarradicular o núcleo metálico y hacer de nuevo el puente fijo.
- Otra situación que se presenta con alguna frecuencia es que cuando en un diente que es pilar del puente fijo y tiene tratamiento de conductos, este tratamiento no se haya realizado perfectamente y uno o varios de los conductos del diente no se haya sellado adecuadamente, o existan lesiones apicales previas que no se hayan resuelto favorablemente. Cuando esto ocurre entonces se puede presentar dolor e inflamación, síntomas de infección radicular en el diente afectado. Lo primero que se debe hacer es un examen clínico para verificar los síntomas, hacer una radiografía del diente o dientes afectados, comenzar un tratamiento con antibióticos y analgésicos. Para solucionar esta situación será necesario retirar completamente el puente fijo, hacer retratamiento de endodoncia en el diente o dientes afectados, o en la mayoría de casos lo que se hace es la exodoncia o extracción de estos dientes, y hacer de nuevo el puente fijo tomando otros pilares de soporte si es posible.